El caso es que a mi lo de hacer de anfitriona, para que lo voy a negar, me gusta. Así que convoqué a varios amigos a una comida en casa (que para los que venían con peques era mejor). Y como no podía ser de otra manera, me intenté esmerar lo máximo posible. Os cuento que hice.
Lo primero fue elegir el menú. Yo no soy una gran cocinera, pero no me da miedo enfrentarme a algo, lo que si tenía claro es que tenía que ser algo que pudiera hacer a la vez y servir. Así que dandole vueltas se me ocurrió hacer canelones de rabo de toro. La primera vez que iba a hacer canelones, y la primera que iba a hacer rabo de toro. Así soy yo....
Para picotear, unas gambitas de Huelva, cocidas al momento, y unos platitos de queso y salchichón ibérico ( lo mejor que tiene esta tierra es que todo está bueno).
Y de postre, la Tarta "Misterio de Chocolate". Desde ahora va a ser un MUST en la casa de los González-Caballero.
Para decorar la mesa, use mi vajilla, y las copas que mi abuela nos regaló para la boda. El mantel, blanco de Zara Home al igual que las servilletas, pero de la edición de Navidad, blancas y plateadas. Para que no estuviera sosa, compré unas flores frescas, en concreto, unos lilium con mis jarroncitos de Ikea. Y mi toque, como no podía ser de otra manera:
Con un trocito de cinta especial Navidad, enrollé las servilletas a los cubiertos, y con un troquel y unos papeles bonitos, en tonos negros, blancos y grises hice las etiquetas con el nombre de cada invitado. Y con otros papeles de la misma gama, imprimí el menú, y lo recorté haciendo unos sobres que tenían que despegar para leerlo entero.
Y el menú lo acompañamos con vinos de la Bodega Arúspide, tinto Ágora, y blanco Landó.
¿Quién quiere ser el/la próxim@ invitad@?
¿Quién quiere ser el/la próxim@ invitad@?
Aquí tienes la receta de los canelones
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